El colegio denuncia en un comunicado que en los últimos días, periodistas de diferentes medios "han sido increpados, insultados e, incluso, agredidos".

"Entre los hechos del todo inaceptables encontramos que se han boicoteado conexiones en directo, estropeado vehículos de una cadena de televisión, se ha escoltado policialmente un equipo o escupido a una periodista", señala la organización profesional.

También lamenta que se hayan requisado cámaras y teléfonos móviles y que se hayan producido "agresiones por parte de agentes del orden a periodistas y fotógrafos, a pesar de ir bien identificados con brazaletes y armillas de prensa".

El colegio catalán afirma que la violencia, física o verbal, es especialmente grave en el caso de las fuerzas del orden, "cuando se extralimitan en sus funciones y hay comportamientos que están fuera de la legalidad".

"Es por esta razón que hemos hecho llegar al delegado del Gobierno español en Cataluña nuestra repulsa a todo comportamiento violento o que persiga limitar la libertad de expresión", agrega el comunicado.