Así lo señaló la organización este viernes en un comunicado en el que denunció que la cancelación de otros 8.000 vuelos previstos entre noviembre y marzo, que se suman a las anunciadas anteriormente, son “inaceptables” y han llevado la situación a un “límite intolerable”.

Asimismo, OCU indicó que se ha dirigido a Ryanair junto a las demás asociaciones europeas del grupo Euroconsumers para pedir explicaciones e instar a la aerolínea a respetar los derechos de los consumidores, sin que por el momento se haya recibido respuesta.

Por otro lado, la organización de consumidores destacó las actuaciones llevadas a cabo por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), que ha abierto un nuevo expediente con el objetivo de comprobar si se está cumpliendo el reglamento europeo sobre derechos de los pasajeros y, de no ser así, emprender acciones contra Ryanair.

En el mismo sentido, la OCU también hizo referencia a la petición que se va a realizar a la Comisión Europea para que las cancelaciones masivas de vuelos por parte de las compañías, por causas atribuibles a ellas, se incluyan entre las infracciones sancionables.

Sobre este aspecto, OCU recordó que los viajeros de los vuelos de noviembre a marzo cancelados no tienen derecho a compensación, pues se les ha avisado con más de dos semanas de antelación y simplemente pueden elegir entre cambiar la reserva a otro vuelo diferente o cancelarla y recibir el reembolso del importe del billete.