Así lo dijo Montoro durante su comparecencia en la Comisión de Hacienda y Función Pública del Congreso de los Diputados, a la que acudió para dar explicaciones sobre las medidas adoptadas por su departamento para evitar que la Generalitat destine dinero público al referéndum del 1-O.

El ministro señaló que este dinero, procedente del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) y de los recursos destinados a pago a proveedores, “le ha venido bien a Cataluña y a toda España, de eso se trata”.

De estos casi 70.000 millones, 23.008 se han destinado al pago directo a proveedores, “siendo la comunidad que más dinero ha recibido”, y ha permitido pagar casi 1,6 millones de facturas de proveedores y servicios públicos.

Esta liquidez, según el ministro, ha supuesto un ahorro de 9.979 millones para Cataluña, que “se transformarán a lo largo de la vida de estos préstamos en un ahorro de más de 19.000 millones de euros”.

Sin embargo, Montoro agregó que “lo paradójico y lo lamentable” es que, tratándose de la región que más se ha beneficiado de los fondos autonómicos y “estando a la cabeza” en crecimiento económico y creación de empleo “en buena medida por esa financiación, sea la que tiene hoy peor calificación y la prima de riesgo más elevada”.

El ministro justificó que esta situación se debe a la política que practica la Generalitat, que “en vez de dedicarse a gestionar una política de estabilidad presupuestaria, se dedica a otras finalidades que ponen en riesgo así la propia recuperación de Cataluña y del conjunto de España”.