Antes de acudir a la reunión de la Junta de Portavoces, Montero fue preguntada si su partido llamará a la movilización el 1 de octubre y contestó que se trata de una “movilización legítima” y que “los ciudadanos tienen la última palabra”. En cualquier caso, dijo que en Unidos Podemos estarán atentos a las decisiones que tome a este respeto Cataluña En Comú, organización hermana.

Razonó que “los ciudadanos deben elegir” qué hacer el 1-O, “como en todo ejercicio de derechos fundamentales” y reiteró la postura oficial de la formación morada de que hay que trabajar para que haya un “referéndum pactado y con garantías”. A su juicio, la “única solución” pasa por permitir que los catalanes se puedan expresar.

“La crisis en Cataluña una de las principales brechas que existen en nuestro sistema político y debe resolverse por vías democráticas”, enfatizó, antes de avisar de que “la crispación, el señalamiento, el choque de trenes y el aumento del nivel de tensión no son buenos para ofrecer una solución democrática”.

Por ello, pidió al resto de fuerzas políticas bajar el nivel de tensión para hallar un acuerdo “en el que los ciudadanos hablen claramente e indiquen a los representantes públicos qué tenemos que hacer para cerrar esta crisis territorial abierta”.

Sobre la propuesta de Pedro Sánchez de crear una comisión de diálogo para la evaluación y modernización del Estado autonómico, dijo que están dispuestos a ver el texto de esa propuesta, advirtiendo de que “esa comisión y ese diálogo solo va a servir si están representadas todas las fuerzas parlamentarias en ese espacio y en ningún caso ese espacio tiene que sustituir la voz de los catalanes en un referéndum pactado”.