En una rueda de prensa celebrada en Barcelona, Domingo aseveró que “no se va a celebrar un referéndum legal y vinculante porque no cuenta con el amparo de ninguna ley formal que lo convoque”. Indicó que si se aprueban las “leyes secesionistas” en los próximos días, el Tribunal Constitucional “las suspenderá” y la Generalitat “deberá acatar la decisión”.

A su vez, el vicepresidente de SCC subrayó que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha afirmado “en más de una ocasión que seguirán adelante pase lo que pase”.

Por ello, dejó claro que la Generalitat “está invitando a los catalanes a participar en la comisión de un delito el próximo 1 de octubre”, un hecho que calificó “muy grave” y que “supera todos los márgenes del sentido común y del sentido democrático que tanto nos caracteriza”.

También lamentó que “engañen a la ciudadanía” afirmando que el 1 de octubre será “una jornada festiva y cívica cuando, en realidad, en el caso de llegar a producirse, sería la materialización de un golpe de Estado impulsado por políticos golpistas que desobedecen las leyes de nuestro sistema democrático”.

"CONFLICTO DE ORDEN PÚBLICO GRAVE"

Mostró su confianza en que “no se va a celebrar el referéndum y menos en las circunstancias actuales” y advirtió que puede haber un “conflicto de orden público grave”, razón por la que los cuerpos de seguridad “no deben posicionarse ni a favor ni en contra de ningún colectivo”.

Subrayó que los Mossos d`Esquadra “no deberían entrar en el debate político”, ya que es un “error” que su major, Josep Lluis Trapero, dé explicaciones públicas, puesto que “el papel de todos los cuerpos policiales debe ser independiente”.

“Los Mossos no tendrían que participar en la Diada, porque hacerlo supondría perder su razón de ser”, dijo.

Por último, defendió la libertad de expresión y trasladó su apoyo al director de ‘El Periódico de Cataluña’, Enric Hernández, tras las acusaciones recibidas por los independentistas tras publicar que la CIA avisó a los Mossos d`Esquadra de un posible atentado en La Rambla de Barcelona.