Este contrato, prorrogables por un máximo de dos años, tiene un valor estimado de 34,1 millones de euros.

Desde el Ejecutivo indicaron que estos servicios son requeridos por el resto de los departamentos del organismo para el cumplimiento de los fines que le son propios, fundamentalmente por los departamentos de Gestión Tributaria, Recaudación, Inspección Financiera y Tributaria, y Aduanas e Impuestos Especiales.

Además, destacaron que el impulso dado por la Agencia Tributara en los servicios prestados a los contribuyentes y empresas a través de Internet “debe mantenerse y mejorarse con un continuo refuerzo de actuaciones tendentes a la profundización y extensión horizontal del número de trámites que se pueden realizar electrónicamente”.

También se pretende implantar funcionalidades avanzadas en las herramientas informáticas que los funcionarios de la Agencia Tributaria tienen a su disposición para la realización de sus tareas de gestión y de lucha contra el fraude.