Según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) a las 12.15 horas, recopilados por Servimedia, en los alrededores de la ciudad de Barcelona había tráfico lento en 30 kilómetros de la AP-7, concretamente en Gelida, La Roca del Vallés y Martorell.

Además, la provincia de Girona tenía circulación lenta con paradas intermitentes en 35 kilómetros en Maçanet de la Selva (AP-7), 7,5 kilómetros en la zona fronteriza con Francia de La Jonquera (AP-7), seis en Playa de Aro (C-31), 3,5 en Vilatenim (C-260) y dos en Santa Cristina de Aro (C-65).

Por otro lado, algunas carreteras valencianas también se encontraban en la misma situación, sobre todo en dirección a la costa, con tres tramos de la A-7 (Torrente, Picassent y Ribarroja) y otro en la CV-500 (El Saler), además del tramo de la N-332 a su paso por la localidad alicantina de Torrevieja.

El tráfico intermitente también era la nota predominante en varias carreteras andaluzas, con la A-7 a la altura de Málaga, la A-4 en Puerto Real (Cádiz), la AP-4 en Las Cabezas de San Juan (Sevilla) y la A-49 en Huevar (Sevilla).

Asimismo, la entrada a Madrid capital empezaba a complicarse en la A-1 a la altura de San Sebastián de los Reyes y en la A-5 cerca de Móstoles.

Según la DGT, este fin de semana se realizarán unos 4,7 millones de desplazamientos, especialmente en recorridos cortos, un 10% más que en otros fines de semana estivales.

Con motivo de la festividad del 15 de agosto, en la que se celebran fiestas patronales en un gran número de poblaciones, la DGT dedica una especial atención a los controles de alcoholemia y a los recorridos de corta distancia.