Este nuevo órgano integrará a un representante de todas las áreas y unidades de negocio del grupo, lo que supone un total de 15 miembros (14 más el presidente), según explicaron a Servimedia responsables de la compañía.

Entre otras funciones, se encargará de identificar aquellos aspectos más relevantes en el ámbito social y ambiental, concretar el plan de acción de Iberdrola Renovables en este sentido y supervisar el cumplimiento de sus principios de transparencia y de ética empresarial.

Comprende las siguientes áreas: recursos humanos; secretaría general; medio ambiente; desarrollo de negocio; administración y control; operaciones; analistas e inversores; compras; auditoría interna; reputación y comunicación, y negocios España, USA, Reino Unido y resto del mundo.

Desde la empresa señalaron que la constitución de este comité supone un paso más en su política de responsabilidad social, cuyos objetivos coinciden con los de las demás políticas de prevención de riesgos laborales, calidad, medio ambiente, innovación, relación con proveedores y biodiversidad y contratación.

A través de ellas, Iberdrola Renovables busca promover la innovación medioambiental y la ecoeficiencia en su sistema de producción y gestión, tener en cuenta los efectos sobre la biodiversidad en la planificación, implantación y operación de infraestructuras, y reducir progresivamente los impactos ambientales de su actividad.