Así lo ponen de manifiesto los resultados del Barómetro Sanitario 2009, una encuesta realizada a un total de 7.800 personas de toda España para conocer la opinión que tienen los ciudadanos sobre el funcionamiento sanitario público.

Este barómetro, presentado este martes por la ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, incluye cuestiones relativas a la aplicación de la ley del tabaco que arrojan resultados como que el 57,9% de los encuestados creen que la mayoría de los ciudadanos respetan poco o nada esta norma. El porcentaje es en este aspecto también superior al registrado en 2006, cuando era del 47,9%.

En la misma línea, el estudio señala que el 46,5% de los entrevistados consideran que desde la entrada en vigor de la ley del tabaco se fuma menos en todos los sitios, algo que en 2006, 2007 y 2008 creían más personas (54,1%, 52,1% y 52,5%, respectivamente).

También son ahora menos que en 2006 los españoles que están convencidos de que los no fumadores sufren en la actualidad menos molestias que antes de existir la norma, ya que si en 2009 el porcentaje que compartía esta afirmación era del 52,2%, tres años antes se situaba en el 58,5%.

Sobre la modificación legal de la norma, la ministra reiteró que "no hay ningún escollo especial" por parte de ningún grupo parlamentario, por lo que lo previsto es que el proyecto de ley que prohibirá fumar en todos los lugares públicos cerrados entre en el Congreso a primeros de junio y se tome en consideración a finales del mismo mes.

OTRAS CUESTIONES

Además de los aspectos relativos a la ley del tabaco, el barómetro incluye cuestiones relacionadas con la atención primaria, de especialistas y hospitalaria y refleja que siete de cada diez encuestados consideran que el Sistema Nacional de Salud (SNS) funciona bastante bien o bien, aunque con necesidad de algunos cambios en puntos como el de las listas de espera, que suspenden con una nota de 4,78 puntos sobre diez.

Igualmente, el estudio refleja que la mayoría de los españoles considera que la sanidad pública es equitativa en sus prestaciones, si bien el 84,5% reclaman a las comunidades autónomas más coordinación para conseguir una mayor igualdad en la prestación de servicios.

La mayoría de los ciudadanos se manifiestan partidarios del uso del sistema sanitario público frente al privado. Así ocurre en las cuatro opciones analizadas por el estudio: Atención primaria (62,8% frente a 31,3%); consultas especializadas (46,8% frente a 45,2%); ingreso hospitalario (58,4% frente a 34,1%), y urgencias (59,7% frente a 32,9%).

En atención primaria los aspectos mejor valorados son la cercanía de los centros (7,74). el trato recibido por el personal sanitario (7,42), y la confianza y seguridad que transmite el médico (7,40).

En las consultas de atención especializada, lo que mejor nota obtiene es el número de especialidades al que hay acceso (7,36), el nivel tecnológico de los equipos (7,30) y el trato recibido de los profesionales (7,21).

Por lo que respecta a los ingresos hospitalarios, los puntos mejor valorados son el alto nivel tecnológico y de equipamiento de los centros (7,72), los cuidados del personal de enfermería (7,25) y médico (7,19) y la información clínica recibida sobre el problema concreto de salud (7,15).

Por último, el informe de este año también incluye una consulta sobre el modo de financiación de la sanidad y concluye que sólo el 27,2% de los encuestados saben que se paga vía impuestos. El porcentaje restante cree que se financia mediante las cotizaciones a la Seguridad Social o de forma combinada.