La UE prepara dos normas para prohibir la discriminación de viajeros con discapacidad en autobuses y barcos

ZARAGOZA
SERVIMEDIA

La Unión Europea está preparando dos normativas, semejantes a las existentes ya en el transporte aéreo y ferroviario, para evitar que autobuses y barcos nieguen el acceso a sus viajes a las personas con discapacidad y a las que, sin serlo, tienen problemas de movilidad.

Así lo anunció este jueves en Zaragoza Silvio Grieco, funcionario de la Unidad de Integración de Personas con Discapacidad de la Dirección General de Empleo, Asuntos Sociales e Igualdad de Oportunidades de la Unión Europea, quien participó en un taller sobre Infraestructuras y Transportes de la Conferencia sobre Discapacidad y Autonomía Personal que se celebra hasta este viernes en la ciudad maña.

Grieco explicó que si todo va bien, las normativas europeas sobre transporte en barco y autobús podrían aprobarse a finales de este año, si bien reconoció que sus procesos de tramitación son "complejos".

Según dijo, el objetivo de las normas sería, como en las referidas al avión y el tren, evitar discriminaciones y proporcionar asistencia a las personas con discapacidad.

ATENDO

Junto a este representante de la UE, participó en el taller Wenceslao Sánchez, gerente de Prestaciones de Accesibilidad a Viajeros de Renfe, quien dio a conocer a los asistentes el servicio de atención a personas con discapacidad denominado Atendo y apuntó que se está analizando la posibilidad de ofrecer este servicio "de puerta a puerta", es decir, recogiendo al usuario en su domicilio y acompañándolo hasta el tren.

Sánchez se mostró satisfecho por los logros conseguidos en Atendo, pero reconoció que tiene una "asignatura pendiente" y es la mejor adecuación a las necesidades de los viajeros con discapacidad intelectual.

El responsable de Atendo indicó que este servicio presta unas 23.000 asistencias al mes, según los últimos datos, lo que significa alrededor de 2.000 más que el año pasado. En Alta Velocidad, se presta este servicio a cinco de cada mil viajeros.

Y es que, afirmó Raúl López, asesor de accesibilidad del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) y trabajador de la empresa de Fundación ONCE Vía Libre, hacer accesible un transporte significa integrar a las personas con discapacidad y con movilidad reducida en la sociedad.

Desde su perspectiva, no es la discapacidad la culpable de no poder acceder a un medio de transporte, sino más bien al contrario, es decir, que el vehículo no esté preparado para que puedan utilizarlo todas las personas es lo que hace a un viajero sentirse deficiente en algo.

A juicio de Ivo Konings, vicepresidente de la Oficina de Accesibilidad belga, si las empresas se dieran cuenta de la importancia de ofrecer un transporte accesible, ganarían clientes. Por eso, finalizó, es necesario mejorar la información relativa a la discapacidad, para que todo el mundo sepa de lo que se está hablando.

(SERVIMEDIA)
20 Mayo 2010
IGA/lmb