Reducir la brecha de desigualdad que afecta a la comunidad gitana y garantizar el derecho a la no discriminación han sido el centro de la acción de la FSG, con implantación en 14 comunidades autónomas y con 54 sedes de trabajo en 77 localidades, según informó la entidad.

En 2016 atendió a un total de 31.847 personas que se beneficiaron directamente de sus programas y actividades. En palabras de Isidro Rodríguez, director general de organización, "en 2016 seguimos demostrando que los programas en ámbitos clave como el empleo, la educación o la vivienda, adaptados a las necesidades de las personas, son una inversión social rentable y mejoran la vida de muchas familias gitanas”.

El programa de formación profesional y empleo Acceder se ha consolidado como “la iniciativa europea más eficaz y de mayor impacto de inclusión sociolaboral dirigida a la población gitana”, destacó la FSG. Sólo en 2016 atendió a 18.083 personas de las que 3.743 consiguieron un empleo.

Además, se han firmado 5.757 contratos de trabajo, para lo cual la fundación ha colaborado con más de 1.361 empresas y ha puesto en marcha 931 acciones formativas que llegaron a 5.201 personas.

Aprender Trabajando, iniciativa específica de formación y prácticas laborales en empresas para jóvenes en situación de exclusión, en colaboración con muchas de las principales empresas españolas, alcanzó una tasa de inserción laboral del 39%, consiguiendo que 124 jóvenes encontraran un empleo, según los datos del citado informe.

“La FSG trabaja convencida de que la educación cambiará el futuro de la juventud gitana”, manifestó la entidad. De ahí la necesidad del programa ‘Promociona’, que trata de combatir e fracaso escolar entre la población gitana, que llega al 64% frente a la media del 13% del conjunto de la población.

‘Promociona’ trabajó el curso pasado con 1.292 alumnos y alumnas, de los que el 80% de los que cursaban 4º de la ESO obtuvieron el título de Graduado en Secundaria Obligatoria y el 87% pasó a cursar estudios no post obligatorios.

A través de los programas que financian entidades como Obra Social ‘la Caixa’ o la financiación que llega a través de los programas del IRPF, en 2016 se atendieron a 2.570 menores y a sus familias, fundamentalmente en acciones destinadas a paliar carencias de primera necesidad relacionadas con la alimentación, la salud, la higiene y el apoyo escolar.

Para dar respuesta a la desigualdad y a la múltiple discriminación que viven las mujeres gitanas, este año se incorpora el nuevo programa ‘Calí’, por la igualdad de las mujeres gitanas, que ha atendido a 1.373 mujeres en itinerarios sociolaborales y en acciones de sensibilización y lucha contra la discriminación junto a un grupo de profesionales gitanas al frente.