Así respondió el jefe de la diplomacia española en la sesión de control al Gobierno del Congreso a una pregunta de la diputada socialista Carlota Merchán sobre la disponibilidad del Ejecutivo para cumplir los compromisos adquiridos en materia de reasentamiento y reubicación de refugiados.

Dastis afirmó que el Gobierno está haciendo “todo lo que está en su mano” para cumplir con dichos compromisos por “solidaridad con los interesados”, por lealtad con los Estados miembros de la UE, por “convicción moral” y porque “lo demanda la sociedad”.

No obstante, comentó que es “difícil” cumplir con el compromiso de acoger a 17.337 refugiados procedentes de Siria cuando, dijo, la propia UE reconoce que hay 12.400 individuos listos para ser reubicados desde Grecia y algo más de 4.000 desde Italia.

A pesar de ello, Dastis presumió de que España ha puesto en marcha 1.500 procedimientos de reubicación que han permitido a 886 personas llegar a España. También comentó que se han abierto 960 procedimientos de reasentamiento a los que se sumarán otros 542 próximamente.

El ministro comprendió los “anhelos de solidaridad” que existen entre los españoles sobre esta cuestión, pero llamó a respetar los procedimientos de la UE en materia de acogida de refugiados.

Esto le sirvió para dejar claro que España “no puede elegir”, sino que “tiene que esperar a que nos digan a qué personas tenemos que acoger”. Al mismo tiempo, subrayó que el Gobierno trabaja para que se produzcan las “mejores condiciones de acogida e inserción social” de los refugiados. Por ello, incidió en la importancia de trabajar conjuntamente con los ayuntamientos, las comunidades autónomas y las empresas privadas.

Por su parte, Merchán recordó que ya han pasado dos años del compromiso del Gobierno de acoger a 17.337 refugiados de Siria. Hasta la fecha, dijo, sólo ha acogido a 1.304, lo que ha motivado que la Comisión Europea haya emitido “duras” conclusiones y resoluciones sobre las políticas de reasentamiento del Ejecutivo.

Acusó al Gobierno de “no actuar ni con inteligencia ni con generosidad” en materia de refugiados y pidió a Dastis que piense “qué legado quiere dejar” tras su paso por Exteriores, ya que el “peor” sería el de “ser sancionado por no acoger a quienes huyen de la guerra y del terror”.