EL cometido de este Fondo, creado en 2009, es aumentar la competitividad y reducir la pobreza en la zona mediante el desarrollo y el refuerzo de los sistemas nacionales de innovación.

Este Fondo contaba ya con otros dos millones de euros aportados por el Gobierno de Finlandia.

Con la contribución española los recursos de este instrumento se duplican y se abre el número de proyectos que se acometarán.

Mientras que el Ministerio de Ciencia e Innovación establece las prioridades en la orientación de las inversiones del fondo, la ayuda monetaria será desembolsada por el Ministerio de Economía y Hacienda. Finalmente, el BID es el encargado de identificar y gestionar los proyectos.

En este sentido, se consideran áreas temáticas prioritarias las siguientes: salud, agro-alimentación, medio ambiente, energías renovables, tecnologías de la información y la comunicación.

Garmendia subrayó la importancia de la cooperación en el conocimiento como un eje fundamental de la cooperación entre ambas regiones. Además resaltó que las políticas públicas de I+D y de fomento de la innovación deben ser parte esencial de los programas para la recuperación y el crecimiento económico a medio y largo plazo.