Estas tres entidades afirmaron que las personas sin hogar tienen "igual dignidad que cualquier otro ciudadano" y "se enfrentan todos los días a una vida llena de dificultades", por lo que censuró que un videojuego convierta "ese itinerario de calamidades en un pasatiempo".

"Jugar con la realidad de personas sin hogar que día a día se enfrentan a la dureza de las calles, a enfermedades, a la muerte, a la falta de derechos y de recursos por situaciones como la pérdida de un ser querido o de un trabajo es, por encima de todo, una falta de respeto a estas personas y un hecho cruel e inhumano", añadieron.

Solidarios, Fundación RAIS y Acción en Red deploraron que el videojuego haya triunfado en otros países, especialmente en Alemania, de donde procede. "Sin lugar a dudas, de tener éxito en nuestro país, haría un flaco favor al esfuerzo que mantenemos muchas organizaciones por romper estereotipos y prejuicios sobre las personas sin hogar", indicaron.

"Las personas sin hogar no son 'mendigos', 'transeúntes', 'vagabundos', 'indigentes'… Son personas excluidas de nuestra sociedad, cuyo mayor problema es la soledad y cuyo objetivo, no es, sin duda alguna, 'convertirse en el mendigo más famoso y rico', sino salir de una realidad que mina su esperanza de vida y sus ilusiones día a día. Las personas sin hogar no son delincuentes ni criminales sino receptoras de una violencia constante. En lo que va de año, 55 personas sin hogar han muerto en España", apostillaron.

Estas organizaciones que trabajan con las personas sin hogar propusieron "un reto aún más desafiante que el ponerse detrás de la pantalla de un ordenador: nosotros abrimos las puertas para todo aquel que quiera cambiar el ratón por un balón de fútbol para jugar un partido con personas sin hogar o hacer una ruta por las calles de Madrid con un termo de café, como arma, y ganas de charlar y de acompañar a estas personas, como objetivos".