Según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores, así se pronunció el jefe de la diplomacia española durante la reunión que mantuvo con el enviado presidencial norteamericano para dicha coalición, embajador Brett McGurk.

Durante el encuentro ambos reafirmaron su compromiso de trabajar juntos en una “estrategia común y a largo plazo para debilitar y derrotar” al EI. Para ello, consideraron “esencial” incidir en las cinco líneas de acción definidas en la reunión ministerial celebrada en Bruselas en diciembre de 2014.

Dastis comentó que la coalición internacional se erige como la “herramienta más eficaz” para derrotar al EI y dejó claro que la presencia de España en la misma supone una “prioridad” para el Ejecutivo.

España aporta 518 militares y guardias civiles a la coalición internacional contra el EI. El grueso del contingente se encuentra en la base iraquí de Besmayah, donde se encarga de la instrucción de las tropas iraquíes para el combate contra los yihadistas.

El ministro subrayó la importancia de evitar la radicalización y el extremismo violento, así como la necesidad de contrarrestar los mensajes de odio empleados por el EI.

Por su parte, McGurk destacó la contribución de España en la lucha contra el EI y reiteró la importancia de que España siga siendo un miembro activo de la coalición internacional.