Las pinzas, elaboradas con material plástico antialérgico, utilizan una placa con dientes redondeados para presionar el pabellón auricular, produciendo un estímulo energético sobre los puntos que reflejan la parte enferma.

La presión de la pinza es de unos 250 gramos, "aunque puede producir molestias diferentes en cada paiente y tiene una relación directa, ya que a medida que desaparece las molestias de la espalda lo hacen también las de la oreja", explicó Carlos Lavin.

"En las terapias aplicadas en la oreja", añadió, "los acupuntores chinos están sustituyendo las agujas por semillas sésamo fijadas sobre el pabellón auditivo, que producen el mismo efecto y evitan el dolor que causan las agujas en la oreja, que es un órgano más sensible".

Las pinzas utilizan el nuevo sistema e imitan el tamaño y la forma de las seillas de sésamo, "lo que evita un dolor innecesario para la mentalidad occidental y acerca un analgésico nada invasivo".

Ese producto fue lanzado al mercado el mes de octubre del año pasado, utilizando como base la reflexología del pabellón auricular (mapa que refleja los puntos de la oreja que reflejan la práctica totalidad de los órganos del cuerpo humano).

En el próximo mes de marzo, la empresa tiene previsto presentar en el mercado otras pinzas indicadas para el tratamiento de la ansiedad de os obesos, que les empuja a comer sin necesidad.