En un comunicado, el presidente de ATA, Lorenzo Amor, afirmó que “de confirmarse estos datos el próximo 12 de mayo, no es una buena noticia para los autónomos”.

“Una inflación elevada supone un incremento de los costes para la actividad y el negocio de los autónomos”, apuntó Amor, que añadió se trata de “un aumento de costes que no repercuten en el precio final de sus productos y servicios prestados, lo que conlleva una importante pérdida de poder adquisitivo y competitividad es sus negocios”.