En la misiva, a la que ha tenido acceso Servimedia, Bulc hace hincapié en que es “plenamente consciente de las dificultades prácticas que todavía existen en el transporte aéreo con una discapacidad” e informó de que ha señalado este caso “al organismo nacional de ejecución en el Reino Unido, la Autoridad de Aviación Civil del Reino Unido”.

En este sentido, aconsejó a García a que presente “una queja formal a la Autoridad de la Aviación Civil para que se garantice un seguimiento de su caso” y expresó su compromiso de “trabajar con las autoridades nacionales y el sector del transporte para evitar situaciones como esta”, puesto que asegura tener “un gran interés en mejorar la experiencia de viaje de las personas con discapacidad en todos los medios de transporte”.

“Mis servicios están controlando minuciosamente la aplicación del Reglamento por los Estados Miembros incluyendo el preguntar a las autoridades nacionales de ejecución para informar sobre el número de quejas que reciben”, argumentó Bulc, que añadió que han constatado que “no se refleja correctamente la realidad de las personas con discapacidad que viajan”, por lo que recordó que “siempre hay que quejarse de los incidentes, no sólo a la aerolínea o al aeropuerto, sino también a las autoridades nacionales de ejecución”.

Por último, pide que se tenga en cuenta su compromiso a “reunir buenas prácticas relacionadas con el transporte de personas con discapacidad o movilidad reducida en todos los medios de transporte” y que pretende “producir una recomendación sobre papel basada en buenas prácticas en este campo a finales de 2017 para que se puedan compartir los buenos ejemplos entre los Estados miembros y operadores de transportes”.