En el transcurso de la misma se ha acordado que tanto en el proyecto de Plaza de España como en el de Gran Vía se deben aplicar los principios de la accesibilidad universal y el diseño para todas las personas, según explica el Cermi en una nota.

A juicio de la entidad, resulta necesario que su aplicación sea funcionalmente útil y contemple los mejores ejemplos de buenas prácticas. “De esta forma, se podrá evitar la inadecuación final de las medidas adoptadas, favoreciéndose así la eficiencia en la aplicación de los recursos”, añade.

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Madrid se establecerá el procedimiento y metodología a seguir para el trabajo conjunto, desde su inicio, en el desarrollo de ambos proyectos, asegurando que la accesibilidad universal sea uno de los elementos clave.