Los beneficiados de esta educación, a la que la Generalitatdestinó 323 millones de pesetas y que está encaminada a lograr su inserción laboral, fueron miembros de minorías étnicas, inmigrantes, internos de centros penitenciarios, drogodependientes en fase de rehabilitación y otras personas en situación de desarraigo social. De los 690 asistentes a estos talleres de empleo, 390 eran de Valencia, 210 de Alicante y 90 de Castellón.

El consejero de Empleo valenciano, Rafael Blasco, declaró que estos datos son "una prueba del gran esfuerzo que realiza el Gobierno alenciano por facilitar la inserción laboral de los desempleados, con lo que poco a poco estamos obteniendo resultados".