Durante su intervención en el Pleno del Congreso para explicar la reducción del déficit, el líder del Ejecutivo explicó que la rebaja será proporcional a los ingresos, es decir, que afectará a los salarios más altos de los empleados públicos.

Como medida ejemplarizante, el presidente avanzó que se bajará el sueldo en un 15% a los miembros del Gobierno.

En cuanto a las pensiones, dijo que en 2011 se suspenderá la revalorización de las mismas, excluyendo las no contributivas y las pensiones mínimas.

Además, también anunció la eliminación del régimen transitorio para la jubilación parcial que se aprobaron en diciembre de 2007.

De esta forma, para acceder a la jubilación parcial, los trabajadores deberán tener cumplidos los 61 años, deberán llevar seis años de antigüedad en la empresa, el límite de reducción de la jornada será del 75% y deberán tener 30 años cotizados a la Seguridad Social.

Hasta ahora la introducción de estas medidas se iba a producir en un periodo de entre cinco y siete años.

Respecto a la inversión pública estatal, Zapatero afirmó que se prevé una reducción de 6.045 millones de euros entre 2010 y 2011, al tiempo que los ayuntamientos y las comunidades autónomas ahorrarán adicionalmente 1.200 millones de euros.

También se verá reducida en 600 millones de euros entre 2010 y 2011 la Ayuda Oficial al Desarrollo.

En materia sanitaria, el presidente aseveró que se trabajará para un consumo de medicamentos más eficiente y vinculado a las necesidades reales de los pacientes. Así, se adecuará el número de unidades de los envases de los medicamentos a la duración estandarizada de los tratamientos.

Igualmente, se hará posible la dispensación de medicamentos en unidosis, a través del fraccionamiento de los envases.

De este modo, el paciente podrá comprar la cantidad exacta de unidades que precise para su tratamiento.

DEPENDENCIA

Por otra parte, el presidente del Gobierno también anunció algunos cambios en materia de dependencia. En concreto, cuando una persona comienza a cobrar una prestación económica por dependencia, junto a la primera mensualidad se pagaba una cantidad única equivalente al número de meses que hubieran transcurrido desde la solicitud, lo que se conoce como retroactividad.

A partir de ahora, se establece un tiempo máximo de seis meses para la resolución de las solicitudes de servicios de dependencia hasta la adjudicación de la prestación. De este modo, cualquier persona que lo solicite no tardará más de seis meses en empezar a recibir la prestación.

El Gobierno también ha decidido, desde la entrada en vigor de esta nueva norma, que se elimine la retroactividad "que ya no tendría sentido", puesto que no se producirán retrasos.

Además, los derechos de retroactividad que ya se hayan generado hasta ahora podrán pagarse en un plazo máximo de 5 años.

El líder del Ejecutivo se mostró convencido de que esta medida no sólo permitirá un ahorro, sino que incentivará la creación de empleo puesto que más personas podrán acceder a la citada prestación.

La próxima semana el Consejo de Ministros aprobará un decreto ley recogiendo todas estas medidas para su entrada en vigor inmediata.

Además, el próximo viernes el Gobierno examinará el techo de gasto para los Presupuestos Generales del Estado para 2011 y el Plan de Austeridad 2011-2013, que incorporará las consecuencias de las decisiones anunciadas.

IMPACTO EN PIB

Zapatero reconoció que las medidas anunciadas para el ajuste adicional del déficit público "afectará transitoriamente al crecimiento" de la economía española. Así, apuntó que estiman un recorte de "unas décimas inferior" al previsto en el crecimiento del PIB en 2011, y que estaba situado en el 1,8%.

El presidente del Gobierno apuntó que anunciar estas medidas "no es fácil para el Gobierno y la dificultad" de hacerlo "no se aminora porque estemos convencidos de su necesidad".

Así, subrayó que se pide un esfuerzo a la sociedad española, a los ciudadanos, a las administraciones públicas. Se trata de un "esfuerzo colectivo justificado por el fin que perseguimos", de reducir el déficit público por debajo del 3% en 2013.

"Son medidas que son imprescindibles para reforzar la confianza en la economía española y que buscan ser lo más equitativas posibles,", defendió el líder del Gobierno quien aseguró que "la situación es difícil y sería insensato ocultarlo".

En todo caso, lanzó un mensaje de optimismo al indicar que "lograremos salir adelante, volver a la recuperación, a la estabilidad y a la creación de empleo".

Las medidas "son equitativas pues pretenden repartir con justicia ese esfuerzo nacional que hoy, como presidente del Gobierno, pido a los ciudadanos".

En este sentido, comentó que "hasta ahora, las personas que han perdido su empleo y los empresarios que han visto frustradas o reducidas sus aspiraciones han pagado con creces su peaje en esta crisis. No es a ellos a los que quepa demandar solidaridad, sino a la inversa, ofrecérsela", agregó.