Así lo aseguró este lunes el presidente de la Sociedad Española de Hipertesión, Julián Segura, durante la presentación de los últimos hallazgos científicos del 'Proyecto Cardiorisc', una iniciativa española puesta en marcha hace más de una década por el impulso de esta sociedad científica y que aglutina el mayor registro de casos clínicos de hipertensión disponible en todo el planeta.

El principal legado de 'Cardiorisc' es la generalización y consolidación de un método de medición de la presión arterial, el monitoreo ambulatorio de la presión arterial (MAPA), que ofrece un control más riguroso de los niveles de presión arterial de los pacientes.

El sistema se basa en la realización de diferentes mediciones al paciente durante un periodo de 24 horas a través de un dispositivo electrónico y sirve para eliminar las distorsiones que ofrecían los sistemas tradicionales de toma de la presión arterial, sometidos a factores como la denominada 'hipertensión de bata blanca' (la que se explica por los nervios del paciente a la hora de ser controlado), que alteraban la realidad de los niveles y empujaban a los facultativos a diagnósticos erróneos.

Según ha demostrado el Proyecto Cardiorisc, este nuevo sistema de medición de la presión arterial "ha permitido controlar de forma eficaz la presión arterial del 56% de los pacientes, mientras que con los métodos tradicionales este porcentaje ni siquiera alcanzaba el 25%", subrayó Julián Segura.

"Una de cada tres personas con hipertensión que estaba mal controlada en consulta, está bien controlado con el MAPA", defendió Segura, que aprovechó para instar a las autoridades a dotar del personal médico de los medios necesarios para realizar un control adecuado de este factor de riesgo.

Según los expertos de la Sociedad Española de Hipertensión, la adecuada medida de la presión arterial es básica para controlar la evolución de los pacientes y para prescribir el tratamiento más adecuado, y es uno de las grandes logros del Proyecto Cardiorisc.

Julián Segura subrayó que 'Cardiorisc' redujo dos de los grandes problemas con pacientes hipertensos: la llamada 'hipertensión enmascarada', derivada del mal control de la presión arterial de los pacientes ya diagnosticados; y la 'hipertensión resistente', un fenómeno que lleva a la sobremedicación de algunos pacientes por la carencia de datos fidedignos de su respuesta a la medicación y que 'Cardiorisc' permitió situar en el 12% de la población hipertensa total.

Estos últimos hallazgos del Proyecto Cardiorisc serán presentados a partir del próximo miércoles en la XXII Reunión Anual de SEH-LELHA, que tendrá lugar en el Recinto Ferial de Madrid IFEMA) hasta el próximo viernes.