El encuentro arrancó este viernes, en el Centro Cultural Eduardo Úrculo, con una mesa redonda en la que se analizaron capacidades y límites de la economía social para superar la precariedad laboral, crear modelos de trabajo que permitan una mayor conciliación con la vida laboral y personal o llegar a sectores altamente especializados. En la mesa se analizó además el papel de las administraciones públicas como empleadores para fomentar la economía social.

El Ayuntamiento de Madrid se suma a otras ciudades y administraciones públicas a nivel internacional en su apuesta por la economía social. Un convenio con la Red de Redes de Economía Alternativa y Solidaria apoya la organización de este congreso y otras actividades, además de proyectos en Puente de Vallecas, Centro y Villaverde para dar asistencia y asesoramiento a entidades y personas interesadas en la economía social.

Además, se ha puesto en marcha el proyecto Mares de ecosistemas urbanos para una economía sostenible, e instrumentos específicos con el fin de afrontar uno de los mayores retos de la economía social, encontrar financiación adecuada.