Las cenizas del volcán cuestan 41 millones a las aerolíneas españolas

- Piden más vuelos experimentales para calibrar mejor el efecto de la nube volcánica

MADRID
SERVIMEDIA

Las aerolíneas españolas perdieron unos 41 millones de euros como consecuencia de los vuelos que no pudieron operar durante el mes de abril por culpa de las cenizas provocadas por la erupción del volcán Eyjafjalla.

Así se recoge en una primera estimación sobre los costes de la crisis provocada por la nube volcánica elaborada por la Asociación de compañías Españolas de Tráfico Aéreo (Aceta).

En declaraciones a Servimedia, un portavoz de Aceta explicó que en dicha estimación las compañías han tenido en cuenta los ingresos perdidos, el coste de las ayudas facilitadas a los pasajeros y las compensaciones, así como el ahorro obtenido por el carburante que no debieron utilizar.

Con las pérdidas generadas a las aerolíneas, el sector turístico español supera los 240 millones de euros perdidos durante el mes de abril como consecuencia de la nube volcánica. Según la Secretaría de Estado de Turismo medio millón de turistas no pudo llegar a España durante esos días.

A esta cifra se le deberán sumar las nuevas pérdidas generadas por los contínuos cierres del espacio aéreo irlandés y de Reino Unido durante los últimos días y los sufridos en la península Ibérica desde el sábado.

Por ello, Aceta, al igual que el resto de aerolíneas europeas, pide a las autoridades aeronáuticas que realicen nuevos vuelos de prueba para mejorar el modelo de cálculo que actualmente permite tomar las decisiones sobre si se cierra o no el espacio aéreo de los países dependientes de Eurocontrol.

Así se lo han transmitido los responsables de Aceta a la Dirección General de Aviación Civil del Ministerio de Fomento en diversas reuniones mantenidas desde el sábado para recibir información puntual sobre la evolución de las cenizas.

Actualmente, Eurocontrol toma las decisiones sobre el espacio aéreo en función de los informes del Centro de Asesoramiento Volcánico (VAAC) de Londres que utiliza un método de medición calibrado a partir de los vuelos experimentales realizados durante el fin de semana del 17 y 18 de abril.

Según el portavoz, “estas mediciones están cuestionadas por las aerolíneas que creen necesarios más vuelos de prueba y reconocimiento para seguir ajustando estos supuestos teóricos a hechos empíricos”.

(SERVIMEDIA)
10 Mayo 2010
JBM/gfm