EL 68 POR CIEN DE LOS CONTRIBUYENTES NECESITA AYUDA PARA HACER LA DECLARACION DEL IRPF
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El 68,2 por ciento de los contribuyentes necesita ayuda para cumplimentar la declaración del IRPF, cuyo plazo se abre el lunes, según un informe-encuesta ralizado el año pasado por el Instituto de Estudios Fiscales (IEF), de la Secretaría de Estado de Hacienda, al que tuvo acceso Servimedia.
De ellos, un 32,1 por ciento recurrieron a asesores fiscales o gestorías, un 29,5 por cien a familiares y amigos, y un 6,6 a su banco, a compañeros de la empresa o a los servicios de asesoramiento gratuito de Hacienda.
Los que requieren más ayuda son, por edades, los mayores de 55 años y los menores de 24; por sexos, las mujeres; por estado civil, los viudos, sparados y divorciados; y por ocupación, los empresarios.
En este último aspecto, el informe señala que "los empresarios son los que manifiestan una mayor necesidad de ayuda externa (87,8 por ciento de los no agrarios y 93,7 de los agrarios), mientras que los profesionales y los perceptores de rendimienos del trabajo son los que se manifiestan más capaces".
Los problemas para rellenar la declaración obedecen en un 41 por ciento de las ocasiones a la dificultad para comprender las instrucciones de os impresos y en un 20 por cien al deseo de asegurarse de que la cumplimetación de los datos es correcta.
Otro 10,4 por ciento alega razones de comodidad y un 3,4 por cien asegura que utiliza la ayuda externa a fin de cerciorarse de que agota todas las posibilidades legales para pagar lo menos posible.
El tiempo medio que dedican los contribuyentes a hacer la declaración es de 6 horas y 48 minutos, de los que la mayor parte transcurren en reunir la documentación, buscar asesoramiento y cumplimentr materialmente el impreso.
LO QUE CUESTA
El informe estima que los trámites y papeleos necesarios para hacer la declaración cuestan a los contribuyentes 87.233 millones de pesetas.
Ese desembolso, que incluye la pérdida de tiempo que las gestiones implican, representa un coste medio por contribuyente de unas 8.000 pesetas, dado que el número de declarantes supera los 11 millones.
El IEF cifra el coste directo del cumplimiento fiscal en 23.442 millones de pesetas, de los que 20.604 millone corresponden al pago a asesores fiscales y gestorías, y 2.838 millones a los trámites imprescindibles para presentar la declaración.
El resto, 63.791 millones de pesetas, es la estimación de los expertos del IEF sobre el coste del tiempo perdido en presentar la declaracion, calculando un precio de 1.018 pesetas por cada hora dedicada a este fin.
Cada contribuyente se gasta una media de 317 pesetas en los trámites de compra de los impresos, consultas telefónicas y desplazamientos para buscar asesramiento y entregar la declaración.
Además, los que recurrieron a los amigos les compensaron con regalos o donativos de 6.378 pesetas de media y quienes visitaron a un asesor fiscal abonaron 5.527 pesetas por las declaraciones simplificadas y 11.481 en las ordinarias.
Respecto a otros países en los que se han realizado investigaciones similares, a los contribuyentes españoles les cuesta más hacer la declaración que a los de Canadá, más o menos lo mismo que a los del Reino Unido y menos que a los e Estados Unidos, Irlanda y Australia.
ESTADO DE ANIMO
La encuesta también hace un repaso del "coste psicológico" de la declaración y señala que "sorprende encontrar un 10,8 por ciento de declarantes a quienes no desagrada nada respecto a su obligación tributaria".
"Cabe suponer", señalan los expertos del IEF, "que son aquellos ciudadanos que han interiorizado hasta tal punto su deber cívico que no les molesta en absoluto cumplirlo".
Entre quienes no mantienen una postura tan ecuánime, losaspectos que más desagradan son la cantidad a pagar (31 por cien), el pensar en el uso que se le va a dar al dinero pagado (27,8 por cien), la complejidad de la tarea (8,3) o el número de papeles que hay que conservar (8,2). Pensar en las sanciones inquieta a un 1,4 por cien y el temor a una inspección, al 1,29.
Los estados de ánimo predominantes tras entregar la declaración son de molestia, para el 7,8 por cien de los encuestados, de alivio para un 43,2 y de indiferencia para un 34,7.
Además, enre los que tienen derecho a devolución, un 35,9 piensa que Hacienda les debería pagar intereses por las cantidades retenidas, un criterio más generalizado entre las personas con mayores niveles de estudios, los empresarios, los profesionales y los asalariados cualificados.
(SERVIMEDIA)
01 Mayo 1993
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