Según informó la entidad, estos resultados se han obtenido gracias "al dinamismo de la actividad con clientes, fruto de un consolidado modelo comercial, en el que destaca la contribución de los proyectos de banca personal y banca de empresas".

La dotación a provisiones se elevó en el conjunto del ejercicio hasta los 413 millones de euros, un 41% superior a 2015, que incluye tanto las provisiones específicas asociadas a créditos y adjudicados, que se reducen un 7,6% interanual, como las derivadas de la aplicación de la nueva regulación contable.

El margen de intereses acumulado alcanzó los 567 millones de euros, un 10% inferior al del mismo período del año anterior.

Mientras, las comisiones netas aumentan hasta los 340,1 millones de euros entre enero y diciembre, lo que supone un 2,1% más que en el mismo período del ejercicio anterior.

En cuanto al crédito, las nuevas formalizaciones realizadas alcanzaron los 5.200 millones de euros a lo largo del año. De este importe, 2.856 millones se han otorgado a empresas y autónomos (+21% interanual) y 1.013 millones a hipotecas para compra de vivienda (+67% interanual).

En crédito a particulares, la formalización de los préstamos hipotecarios para la compra de vivienda alcanzó un importe de 1.013 millones de euros en el año, un 67% superior al de 2015.

La tasa de morosidad ha descendido hasta situarse en el 8,9% al cierre del año 2016, mientras que el volumen de activos dudosos descendió un 0,8%.

Por su parte, la venta de inmuebles adjudicados sigue su trayectoria ascendente, con un volumen de 286 millones de euros (+10%), que han generado 13 millones de euros de impacto neto positivo en la cuenta de resultados.