Según el último Boletín Económico del Banco de España, "en conjunto se aprecia un leve incremento de la oferta de crédito en los tres primeros meses del año, que, en cualquier caso, resulta pequeño si se compara con las variaciones en sentido contrario, acumuladas en los trimestres anteriores".

En cuanto a los criterios para la concesión de nuevos créditos a las sociedades no financieras, experimentaron, por primera vez desde 2006, "una cierta relajación".

Mientras, los correspondientes a la financiación a los hogares para adquisición de vivienda se mantuvieron estables, mientras que los relativos a la otorgada para consumo y otros fines volvieron a hacerse "ligeramente más laxos".

Además, la encuesta pone de manifiesto que para el periodo de abril a junio las entidades no anticipan cambios significativos en la oferta en ninguna de las dos áreas.

Por su parte, los intermediarios españoles percibieron una demanda de préstamos estable por parte de las empresas, por segundo trimestre consecutivo, mientras que se redujo el ritmo de caída de la de las familias, "haciéndose nulo en el caso de las solicitudes de fondos para la adquisición de

inmuebles".

No obstante, en España, las entidades percibieron un "empeoramiento ligero" en los instrumentos de medio y largo plazo, y algo mayor en la capacidad para transferir riesgo de crédito fuera del balance.

Además, los criterios para la aprobación de nuevos préstamos a los hogares españoles para consumo y otros fines continuaron relajándose suavemente en el inicio de este año, prolongando la pauta de los tres meses previos.