Según informaron a Servimedia fuentes populares presentes en el debate, que duró más de cuatro horas, la Ponencia de Estatutos rechazó varias enmiendas de afiliados de Madrid, Galicia y Valencia para restringir el funcionamiento de las gestoras, al considerar que en ocasiones se "instrumentalizan" a favor de un candidato.

Los enmendantes criticaron expresamente casos como el de Isabel Bonig en el PP de la Comunidad Valenciana y el de Cristina Cifuentes en el PP de Madrid, pues entienden que al llevar 19 y 12 meses, respectivamente, al frente de sus respectivas gestoras tienen ventaja si optan a presidir el partido en los congresos regionales que se celebrarán tras el nacional.

La enmienda más importante exigía impedir de forma expresa que quien preside una gestora pueda presentarse después como candidato a presidir el partido, ante el riesgo de que utilice los recursos del aparato para favorecer sus aspiraciones frente al resto.

Otras propuestas planteaban de forma similar limitar el tiempo de duración de una gestora, hasta el punto de obligar a la convocatoria de un congreso interno trascurridos dos meses de la creación de este órgano de dirección nacional.

Sin embargo, todas las modificaciones a los Estatutos fueron rechazadas por la Ponencia y por los compromisarios que participaron en las votaciones hasta el punto de que el vicesecretario general de Organización del PP, Fernando Martínez Maíllo, afirmó durante el debate que hacer algo así sería "dispararse un tiro en el pie" porque en ocasiones se dan circunstancias excepcionales que aconsejan alargar una dirección interina de este tipo.