Según informó el Ministerio del Interior, el escondite, que fue encontrado en el marco de la ‘operación Nobel-Constancia’, data del año 2000, cuando los Grapo estaban en plena reorganización directiva y orgánica.

Interior destacó que este hallazgo supone un “golpe” contra la infraestructura oculta de esta banda criminal y abre “la posibilidad de esclarecer atentados de los que aún se desconoce su autoría o no han sido esclarecidas”.

El Ministerio explicó que “el zulo contenía numerosa información sobre potenciales objetivos de esta organización terrorista, así como diversa documentación interna de la banda para su funcionamiento y material logístico de primera necesidad para usarlo en caso de huida”.

NO SE HA DISUELTO

La zona donde fue localizado el escondite ya había sido inspeccionada con anterioridad por la Guardia Civil, ya que distintas líneas de investigación apuntaban a la misma como lugar de reunión y acampada de miembros del PCE(r)-Grapo, en la que meses antes se había encontrado material para dormir a la intemperie.

A falta de un examen más exhaustivo, las primeras investigaciones señalan que el zulo data del año 2000, momento en el que la organización terrorista se encontraba en plena reorganización directiva y orgánica. El examen forense de los elementos encontrados determinará si es posible resolver en el futuro atentados cometidos por estos terroristas.

A pesar de que desde el año 2007 el Grapo no tiene capacidad operativa, esta banda criminal no ha renunciado a la lucha armada centrando sus esfuerzos en la captación de nuevos militantes.

Por este motivo, la Guardia Civil mantiene abiertas diversas líneas de investigación con la finalidad de localizar la parte de la infraestructura que todavía permanece intacta evitando, de este modo, su posible utilización en caso de una hipotética vuelta a la actividad terrorista.