Según comunicó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), este proceso "acordado" afecta aproximadamente a 95 trabajadores que prestan sus servicios en los centros de Alcolea, Andújar y Rivas Vaciamadrid.

Así, se inicia un periodo de negociación con los representantes de los trabajadores, en función de los plazos marcados legalmente.

La compañía subraya que adopta esta decisión dentro de "las medidas necesarias para adecuar su estructura a las necesidades actuales".

El objetivo de este plan es la "racionalización de sus recursos", con la intención de "optimizar" la capacidad utilizada de la nueva configuración industrial, en la que se concentrará la producción en las fábricas de Alcolea (Córdoba) y Tavarnelle (Italia).

Tras un plan de inversiones, dichas fábricas aumentarán su capacidad y permitirán desarrollar la producción del grupo con unos niveles de eficiencia "adecuados" a su negocio actual.

Por último, Deoleo puntualizó que la compañía quiere "racionalizar" la estructura de costes y mejorar la competitividad.