En su declaración, Sáenz se desvinculó de cualquier decisión durante el proceso de adjudicación del contrato para la organización de Congreso Nacional de Parques y Jardines Públicos (PARJAP) de 2004 a una de las empresas de Correa.

También declaró este miércoles el empresario Jesús Calvo Soria, que supuestamente habría ocultados fondos ilícitos de la trama Gürtel. En su declaración esgrimió que su firma y datos personales han sido utilizados sin su consentimiento para realizar actividades irregulares.

Soria explicó que conoció a Correa en 2003. En una cena le comentó que estaba poniendo en marcha un proyecto inmobiliario en Salobreña (Granada), en el que Correa se mostró interesado. El cabecilla de la Gürtel acabó comprando el 22,5% de las acciones de Nuevos Proyectos Inmobiliarios Salobreña SA (NPIS) y a partir de ese momento, se lamentó el empresario, "perdí el control de la sociedad".

Según dijo en el juicio, acabó convencido de que “alguien” estaba utilizando sus datos sin su consentimiento y fue entonces cuando "se acabaron las relaciones personales y profesionales" con Correa.