El jefe del Ejecutivo se expresó en estos términos en un corrillo informal con los periodistas en la tradicional copa de Navidad que se celebró hoy en el Palacio de La Moncloa y donde confirmó que ayer mantuvo una conversación con su homóloga alemana.

Enfatizó que “lo que se ha dicho de Merkel es intolerable”. “Me han parecido brutales los insultos”, señaló después de que el líder de la extrema derecha alemana, Marcus Pretzel, afirmase tras el ataque en su cuenta de Twitter que los fallecidos eran “los muertos de Merkel”.

A su juicio, el tema del terrorismo genera una gran psicosis y, por ello, consideró que lo mejor es ser prudente en este sentido y comentar cuanto menos los temas de seguridad.