Lydia Cacho se ha hecho famosa por sus informaciones sobre la violencia doméstica, la prostitución infantil, la delincuencia organizada y la corrupción política. Estos trabajos le han convertido a menudo en objeto de agresiones y amenazas de muerte.

"A través de su trabajo como periodista y escritora, Lydia Cacho ha puesto de manifiesto la importancia del periodismo justo y preciso para ayudar a las personas a exigir sus derechos", aseguró hoy la subdirectora del IPI, Alison Bethel."Cacho no sólo ha provocado un cambio en su propio país, sino que su lucha y logros hacen de ella una modelo a seguir para las generaciones venideras".

Lydia Cacho comenzó su carrera como periodista a mediados de la década de 1980 para el periódico "Novedades" de Cancún, en el estado oriental de México de Quintana Roo, en la Península de Yucatán. En los 90, escribió artículos sobre la prostitución de las cubanas y argentinas y en 2003, una serie de artículos sobre el abuso sexual de menores.

En su libro "Los demonios del Edén: el poder que protege a la pornografía infantil" (2005), Cacho acusa a poderosos empresarios y políticos de participar en una red que opera en Cancún y los Estados Unidos.

Sobre su nombramiento como "Héroe Mundial de la Libertad de Prensa", que llega en vísperas de que el próximo 3 de mayo se celebre el Día Mundial de la Libertad de Prensa, Cacho afirmó que "el periodismo es una antorcha que ilumina la realidad, y nuestra tarea es asegurar que continúa ardiendo gracias a la profesionalidad, la ética y la voluntad de dar voz a otras personas. Este premio me recuerda que, si las historias de otras personas van a ser oídas, mi voz tiene que mantenerse con vida. "