Así lo indicó en el Pleno del Congreso de los Diputados durante el debate del decreto de medidas urgentes en materia financiera, que incluye, entre otras medidas, retrasar el plazo para la privatización de la participación del Gobierno a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob) en Bankia y BMN.

Según De Guindos, el sector financiero español es ahora “fuerte, transparente y cuenta con un mejor gobierno corporativo”, lo que ha sido “fundamental” para impulsar la recuperación económica en España.

Por ello, el ministro señaló la necesidad de “seguir impulsando la mejora de la regulación financiera”, para que la banca siga apoyando el crecimiento económico.

Por otra parte, explicó que el texto contempla que se alargue dos años el plazo que tiene el Estado para vender su participación en Bankia y BMN, que en ambos casos supera el 65% del capital. El límite temporal que se había fijado para el caso de Bankia era finales de 2017, mientras que para BMN expiraba en marzo de 2018.

Con esta medida, la privatización de Bankia se alargará hasta finales de 2019 y la de BMN hasta marzo de 2020. De Guindos quiso dejar claro que, pese al cambio que introduce el decreto, “nada impide que se haga –la desinversión- sin agotar el plazo”.

En este sentido, señaló que “el mercado tiende a minorar” el valor “cuando más se aproxima la fecha obligatoria de desinversión”, y que con esta norma además de dar mayor margen ahora se “habilita posibles ampliación futuras para evitar minoraciones de valor ligado exclusivamente” que se acerque la fecha de venta.

De esta manera, subrayó que esta norma permite la “compatibilidad” de la necesaria desinversión con la “maximización” de lo que se puede obtener con la venta de Bankia y BMN.

Además, el decreto recoge una modificación del régimen contable de la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb).

Por último, se incluye que España pondrá a disposición de Junta Única de Resolución un importe máximo de 5.291 millones de euros, equivalente a la aportación que tendrán que hacer los bancos al fondo de la misma hasta 2024.