El informe 'Juventud al volante: Por qué es necesario ser prudente' señala que los jóvenes españoles menores de 36 años aprueban en su comportamiento al volante con una nota de 5,7.

El estudio, elaborado a partir de datos de la Estadística de Seguros Automóviles (ESA), ofrece conclusiones sobre los conductores jóvenes, quienes habitualmente provocan más accidentes que los conductores experimentados.

Según el informe, la probabilidad de tener un percance desciende con la edad. Un conductor de 18 años tiene una probabilidad cuatro veces superior de sufrir un accidente que una persona de más de 35. Esto evidencia que uno de los principales motivos de los accidentes es la falta de experiencia.

Para elaborarlo, se han considerado graves aquellos siniestros donde alguna persona resultó herida o fallecida y leves aquellos casos en los que sólo se produjeron daños materiales.

En el comportamiento de los jóvenes al volante en accidentes graves, sólo aprueban los de Soria, Huesca, Ciudad Real, Segovia, Cuenca y Zamora. Por el contrario, las peores notas se sitúan en territorios ubicados en el sur peninsular y en Pontevedra.

Por lo que respecta a los accidentes leves, destacan los rsultados de los jóvenes de Huesca, Ciudad Real, Guipúzcoa, Gerona y Zamora y sólo suspenden los de Madrid, Sevilla, Las Palmas, Málaga, Santa Cruz de Tenerife, Cantabria, y los de las ciudades de Ceuta y Melilla.

Por lo que respecta a los vehículos de dos ruedas, éstos tienden a sufrir más accidentes graves. Un conductor menor de 28 años y con menos de un año de experiencia tiene 10,5 más probabilidades de su sufrir un accidente que uno que lleva 10 años al volante.

Si se mide la gravedad de los golpes, los turismos generan siniestros más costos, con costes 2,4 veces superiores a la media registrada en los accidentes de ciclomotores, motos y escúteres.