La diputada vasca se expresó de esta manera en declaraciones a los periodistas a su entrada a la Junta de Portavoces en el Congreso de los Diputados.

Vio un “sinsentido” todo lo que está sucediendo en esta localidad tras las agresiones a los guardias civiles. “Estamos hablando de un hecho en el que todavía no se ha dilucidado si finalmente la competencia la tiene un tribunal de Pamplona o la Audiencia Nacional, y se han producido detenciones y encarcelamientos”, manifestó.

Denunció que se le estén dando a estos hechos una “entidad política” que a su juicio “no tiene”. “El propio ministro del Interior y el primer informe de la Guardia Civil hablaban incluso de un delito de odio” y “de eso hemos pasado a un delito tipificado como terrorismo alimentado por Covite”, agregó.

Por ello, consideró que se ha puesto en marcha “toda una operación de montaje para terminar haciendo acusaciones del calibre que se han hecho” a unos hechos que vio “muy graves”.

Desde Bildu insisten en que estos hechos “buscan darle un barniz jurídico a algo que no es más que una burda operación para llevarnos a un tiempo del pasado que no tiene nada que ver con la realidad que por fortuna vivimos hoy en día en Euskal Herria”.

Realizó un llamamiento al Gobierno para que “de una vez por todas” sea “consciente” de lo que ha cambiado la situación y le pidió que actúe con “responsabilidad” y contribuya a consolidar un “futuro de convivencia”.