Tras la denuncia de los hechos por parte de Covite, la magistrada se declaró competente para investigar este asunto el pasado 26 de octubre.

En el auto en que se declaraba competente, la jueza acordaba practicar diligencias, entre ellas requerir al juzgado de instrucción de Pamplona que conoce de los hechos testimonio íntegro de las diligencias incoadas, así como librar oficio a la Guardia Civil para que con carácter urgente emita informe sobre la campaña de acoso que sus agentes sufren en la Comunidad Foral de Navarra y, concretamente, en la localidad de Alsasua .

Igualmente, pidió a la Guardia Civil que identificara a quienes realizaron las declaraciones y aparecen en las fotografías publicadas para desmentir colectivamente “la versión oficial” de las agresiones, así como a los titulares y responsables de la cuenta denunciada AltsasukoGaztetxea (@AtlsasukoGA).

Solicita también la jueza a la Policía Foral de Navarra que remita a la mayor brevedad las actuaciones practicadas con motivo de tales hechos.

De acuerdo con la denuncia de Covite y el informe del Ministerio Fiscal, favorable a la competencia de la Audiencia Nacional, la jueza Lamela entiende que los hechos podrían constituir un delito de terrorismo tipificado en el artículo 573 del Código Penal, según la nueva redacción dada por la Ley 2/2015.

AGRESIÓN

Según el informe de la Guardia Civil, los dos agentes se encontraban "de paisano, fuera de servicio, realizando unas consumiciones en compañía de sus parejas" en el bar 'Koxka' cuando entró una persona, que les identificó y agredió a una de las mujeres.

El agresor les dijo que no tenían derecho a estar allí. Poco a poco una veintena de personas presentes les rodearon y comenzaron a insultarles o amenazarles, hasta que llegaron a golpearles.

Los cuatro intentaron entonces abandonar el bar y se encontraron con un grupo de "15 o 20 personas" que también les insultaron y golpearon. En total, indica el informe, una docena de personas han sido identificadas como participantes en los hechos, de las que tres son "los principales promotores" como miembros del colectivo local `Ospa mugimendua´.

Según los citados informes, los agresores conocían la condición de guardias civiles de los agredidos y los hechos se enmarcan en el movimiento 'Alde Hemendik' ('Fuera de aquí'), cuyo obejtivo es expulsar a las Fuerzas de Seguridad del Estado de Navarra.

Este movimiento, agrega el informe, realiza acciones de protesta y "hostigamiento" contra los miembros de estos cuerpos y sus familias, "buscando una sensación de continuo miedo e inseguridad e impidiéndoles realizar una vida en condiciones de normalidad".