Así lo explicó hoy en rueda de prensa la titular española de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, quien ha presidido la reunión informal de ministros de Salud de la UE.

Según recordó Jiménez, al finalizar la Presidencia sueca de la Unión Europea se debatió ya un texto sobre una directiva transfronteriza de servicios sanitarios que no salió adelante por la falta de consenso, por lo que ahora la Presidencia española ha puesto otro sobre la mesa que ha tenido "una recepción muy positiva".

Este texto, todavía un borrador, cuenta con "una parte importantísima ya resuelta", porque incorporará lo que dice al respecto el reglamento 883, que entrará en vigor en el próximo mes de mayo y que resuelve la cobertura sanitaria de los ciudadanos residentes en un país diferente al suyo pero que vuelven al de origen para recibir un servicio de salud.

En estos casos, señaló la titular española de Sanidad, será el país de origen quien corra con los gastos médicos del ciudadano que retorna a su Estado original para recibir atención sanitaria.

Otro supuesto que se da en cuanto a la cobertura sanitaria en la UE y que también está resuelto es el de los ciudadanos que reciben un servicio de salud en el país en el que residen, que no es en el que están nacionalizados. En estos casos, recordó Jiménez, es el Estado de residencia del paciente quien paga la atención médica, con un "dinero alzado" que recibe cada mes del Estado del que proviene el ciudadano.

Por tanto, explicó la ministra, los casos que quedan por regular y que pretende recoger la directiva transfronteriza son minoritarios y se refieren, sobre todo, a la cobertura de servicios sanitarios prestados en países diferentes a los de nacimiento o residencia del ciudadano.

Así, la directiva ha de regular, por ejemplo, quién corre con los gastos médicos de un paciente belga que reside en España pero que recibe asistencia en Italia, aclaró la titular de Sanidad. En estas situaciones, dijo, lo normal será que el paciente necesite autorización previa de un médico para recibir tratamiento en un tercer país.

La directiva habrá de regular, entonces, en qué casos el sistema sanitario podrá reembolsar el dinero gastado en el servicio médico al enfermo.

DESIGUALDADES

Otro aspecto abordado por los ministros y representantes europeos de Sanidad en la reunión informal de Madrid ha sido el de las desigualdades de salud que existen todavía en Europa.

Y es que, aseguró el comisario de Sanidad y Consumo de la UE, John Dalli, también presente en la rueda de prensa, la mortalidad infantil puede ser hasta cinco veces peor en un Estado de la UE que en otro.

Para mitigar éstas y otras desigualdades sanitarias, los responsables europeos se proponen promocionar la salud en grupos vulnerables como la infancia, las embarazadas, las mujeres y la población mayor, para la que buscan un envejecimiento más saludable. Se trata, dijo Dalli, de que "los pobres no estén condenados a tener mala salud".