Se estima que 16.000 niños han sido reclutados por fuerzas y grupos armados en Sudán del Sur desde los enfrentamientos que comenzaron en diciembre de 2013. Según destacó Unicef en un comunicado, más de 800 niños han sido reclutados desde el comienzo de 2016.

Durante la liberación, los niños han sido oficialmente desarmados y se les ha entregado ropa de civil. Además, han pasado un examen médico y han sido registrados en un programa de reintegración.

A lo largo de los próximos meses recibirán asesoramiento y apoyo psicosocial y serán trasladados a un centro de atención temporal, hasta que sus familias sean localizadas.

Una vez se produzca la reunificación, las familias recibirán un paquete de asistencia alimentaria básica para tres meses, así como ganado para apoyar los ingresos del hogar durante el proceso de reintegración.

“Los niños en Sudán del Sur necesitan seguridad, protección y oportunidades”, afirma Mahimbo Mdoe, representante de Unicef en el país africano. “Nuestra prioridad es que vuelvan al colegio y proporcionar servicios a las comunidades para que los niños puedan acceder a un futuro más prometedor”.

“Con el conflicto actual por todo el país, Unicef recibe constantemente informes sobre reclutamiento en estados como Unity y Jonglei, entre otros. Exigimos a todas las partes en conflicto que cumplan con el Derecho Internacional, detengan los reclutamientos y liberen a todos los niños que a día de hoy siguen en sus filas”, denuncia el representante del comité.