Arrimadas participó en un encuentro informativo organizado por Nueva Economía Fórum presentada por el líder de su partido, Albert Rivera, justo el día que se inicia el debate de investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno. Sus primeras palabras fueron para declararse “esperanzada” por las reformas que se pueden poner en marcha una vez que la legislatura comience a pleno rendimiento. “Creo que va a ser la llave para solucionar también lo que tenemos en Cataluña”, dijo.

Denunció que Cataluña lleva ya seis años de bloqueo en los que solo se habla de la independencia y el referéndum y se señala al resto de españoles como “una gran excusa” para explicar todos los problemas. Sin embargo, aseguró, que sea la comunidad más endeudada, en la que más “chiringuitos” políticos hay, más altos cargos y donde más cobran, o donde hay mayor presión fiscal a pymes y clase media es solo responsabilidad de la Generalitat.

Emplazó por ello al presidente, Carles Puigdemont, a “conectar más con la realidad de los catalanes” en vez de impulsar planes de desconexión, y a dejar de crear estructuras de Estado mientras desmantela el estado del bienestar.

Arrimadas aseguró que las últimas decisiones y pronunciamientos del Gobierno de Puigdemont demuestran que es consciente de que “no puede seguir adelante” y de que solo les cabe “volver a la casilla de salida”, a repetir el referéndum del 9 de noviembre de 2014. Saben que no tienen mayoría social para impulsar la independencia de forma unilateral, afirmó, que no tienen cobertura legal ni apoyo internacional y que ese proyecto “no tiene sentido”.

Con la sustitución de Mas por Puigdemont, analizó Arrimadas, “cambiaron el jinete” pero siguieron con su “huida hacia adelante” basada en el “victimismo” y en la “sinrazón” de que la independencia hará a los catalanes “más ricos y felices”, lo cual es una “enorme pérdida de tiempo, de dinero y de oportunidades” y coloca al Gobierno como si pedaleara en una bicicleta estática, sin avanzar a pesar del esfuerzo.

Considera “urgente” una alternativa con un proyecto “sensato, realista, integrador” que puede liderar Ciudadanos porque es un partido “libre” para decir las cosas con claridad, que está “en la centralidad” y que puede ejercer la interlocución imprescindible con el resto de España una vez que Puigdemont asuma “que no puede sacar más conejos de la chistera”.

Como partido “influyente, relevante, decisivo”, cree que Ciudadanos tiene un papel “muy importante” para reconstruir los puentes que han sido “derribados sistemáticamente” por la Generalitat en los últimos años.

REFORMAR ESPAÑA, NO ROMPERLA

Advirtió de que esa alternativa no puede llegar de un partido como Podemos cuya referente en Cataluña, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, reconoce que votó a favor de la independencia y acude a manifestaciones que la defienden, y que denuncia “privilegios” de los políticos mientras se opone en el Congreso de los Diputados a conceder el suplicatorio de Francesc Homs o cree “que si te apellidas Mas, Ridao o Forcadell tienes la potestad de saltarle las leyes”.

Podemos no puede ser alternativa porque sigue centrando sus energías en un referendum que en realidad es “un neverendum, no es bueno ni va a llegar nunca”, y no explican cómo reformar España sino cómo “trocearla”.

También cree que al PP, que ha pactado con los nacionalistas, le falta credibilidad para liderar ese diálogo necesario, y con todo ello sentencia que la legislatura será una oportunidad “para los que queremos reformar España, no romperla” y no tienen miedo a “mojarse” defendiendo las reformas que cren imprescindibles, cambiando “el sectarismo por parlamentarismo y los vetos por negociaciones”.

Arrimadas dejó claro que no renuncia a que en Cataluña se cumpla la ley y a demostrar que incumplirla siendo presidenta del Parlamento tiene las mismas consecuencias que si lo hace cualquier otro ciudadano, pero insistió en la necesidad de acompasar esas decisiones judiciales con política. Si las reformas se ponen en marcha, dijo, a los independentistas “se les acabarán las excusas”. Ellos quieren el “cuanto peor vaya España, mejor, porque más sentido tiene decir ‘vámonos corriendo que esto no funciona’”, pero si España se moderniza su discurso tendrá “menos recorrido”.

Arrimadas dejó claro que su partido siempre apoyará las acciones de la Generalitat destinadas a una acción exterior “normal” y “leal” con España centrada en impulsar la externalización de empresas o atraer turismo, pero no si se pretende aprovechar para fomentar “seudoembajadas” desde las que denunciar que los catalanes viven “sometidos” como en una colonia y reclaman derecho de autodeterminación.

LAS "CHORRADAS" SOBRE SU MARIDO

Preguntada por las informaciones que se han publicado sobre su marido, pidió que no se otorgue credibilidad a todo lo que se publica porque en el plazo de diez días se ha dicho que se había afiliado a Ciudadanos y después que va a montar otro partido. Rivera no quiso comentar sobre lo que considera ‘Sálvame de luxe’, pidió respeto y alertó de que hay problemas muy serios como para hablar de “chorradas”.

Rivera presentó a Arrimadas no solo como una “amiga” sino como una mujer llamada a ser de las más importantes en la política española, que nacida en Jerez puede ser la primera presidenta de la Generalitat, constitucionalista y con menos de cuarenta años, que representa “la valentía y el coraje” de defender sus ideas hablando en castellano “sin complejos” en el Parlamento de Cataluña, un símbolo de convivencia, de pluralidad y de diversidad.

El reto es conseguir que Cataluña deje de ser un problema y sea una oportunidad, y aseguró que en ello Ciudadanos será “parte de la solución” porque siempre ha habido catalanes, dijo, liderando la historia de España.