Lo hizo en la rueda de prensa posterior a su audiencia con el Rey dentro de la ronda de contactos de éste con los partidos políticos con representación parlamentaria de cara a la presentación de un candidato a la investidura como presidente del Gobierno. Fue la primera visita de estas características de un representante de Equo.

Martínez explicó que el no de Equo se debe a una “cuestión ética”, por la corrupción y la “política para amiguetes” que representa en el PP, que a su juicio “no tiene ninguna legitimidad moral” para gobernar, y que presenta un “proyecto continuista y en las antípodas de lo que defendemos”, por el “modelo económico precario y contaminante” que esconde, en lugar de luchar contra el cambio climático, con las posibilidades de creación de puestos de trabajo que cree que conllevaría.

De esto último habló precisamente con el Rey, con quien la diputada dijo haber conversado largo tiempo sobre los retos climáticos globales y su idea del enfoque “verde” como política transversal, que fomentaría la “transición ecológica de la economía” con gran rentabilidad en términos de creación de riqueza económica y social y empleo. A la “pedagogía” sobre estas posibilidades prometió que Equo dedicará gran parte de su tarea parlamentaria.

Martínez no olvidó la resolución del Comité Federal del PSOE que ayer abrió la puerta a la abstención de los socialistas en la investidura de Rajoy y la consiguiente formación de gobierno. “Lamentamos que una situación interna haya desembocado en dar el gobierno al PP”, confesó, antes de augurar que la decisión supone “un desencanto importante en sus votantes”.

La diputada de Equo interpretó, en la línea de Unidos Podemos, que es la crisis del modelo político de la Transición lo que explica que, cuando el PP y el PSOE ya no pueden turnarse, uno de ambos partidos “entra en crisis”. Ello unido a que, en términos generales, la socialdemocracia no ha sido capaz de plantear un proyecto frente a la economía liberal”.