Según informó en rueda de prensa el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, el objetivo de este gasto, que percibirán las asociaciones firmantes del convenio, es reducir la siniestralidad laboral, dar cumplimiento a la normativa de seguridad y salud en el trabajo y establecer mecanismos de control en las obras del ayuntamiento o de cualquier sociedad participada mayoritariamente por el consistorio.

Para ello, se creará un programa específico de visitas a obras, con una periodicidad trimestral, que llevará a cabo un grupo de trabajo integrado por técnicos de los sindicatos y del ayuntamiento. También se pedirá la participación en el grupo de un técnico del Instituto Regional de Seguridad y Salud en el Trabajo de la Comunidad de Madrid.

El convenio contempla también la creación de una Comisión de Seguimiento encargada de controlar el desarrollo de las actividades establecidas en el acuerdo. El grupo de trabajo que visite las obras presentará cada seis meses a esta comisión un informe de las actividades realizadas y, anualmente, una memoria con propuestas y sugerencias.

Esta comisión estará al tanto de los estudios y planes de seguridad correspondientes a cada actuación, y fomentará la realización de campañas de carácter público e institucional sobre seguridad y salud en la construcción.

Este nuevo acuerdo entre el ayuntamiento y los agentes sociales del sector de la construcción supone la reedición del suscrito en el año 2003, que, según Gallardón, se ha demostrado como una buena herramienta para trabajar en un objetivo común, la salud y prevención de riesgos laborales.