Madrid cierra 185 quioscos en seis años

MADRID
SERVIMEDIA

La ciudad de Madrid ha perdido 185 quioscos en los últimos seis años, una actividad centenaria a la que se le atraganta la aparición de las nuevas tecnologías y el auge de la prensa digital. Desde la Asociación de Vendedores Profesionales de Prensa de Madrid denuncian que existen muchos puntos de venta desiertos sin que el Ayuntamiento los saque a concurso.

Desde enero han desaparecido 26 quioscos en la capital, una tendencia que ha crecido en los últimos años y que llevó a que 2015 cerrara con 49 puntos de venta menos en un solo año.

El problema no es tanto la falta de demanda -que la hay- sino que aquellos que se ‘jubilan’ no reabren, informó a Servimedia el presidente de esta asociación, Javier Larrea.

“El Ayuntamiento los tiene que sacar a concurso para ver si alguien los quiere”, opinó este quiosquero, que regenta un punto de venta situado en la calle Cavanilles, en el barrio de Pacífico. Esta mañana se reunió con la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, con motivo del Día del Vendedor de Prensa, que se celebra hoy, y le expresó su preocupación en este sentido.

“Se están quedando vacíos y no hay nadie que los abra”, se quejó Larrea. Por ello, el Consistorio ya se ha comprometido a estudiar con ellos esta cuestión. En un mes se volverán a ver para encontrar una solución, y es que es un negocio que “sigue siendo muy interesante” y aporta beneficios.

Este representante de los quiosqueros aseguró que los miércoles como hoy son “el día fuerte”, porque “sale la prensa del corazón” y aún sigue teniendo mucha demanda entre los alrededor de 750 quioscos que hay en la capital.

Aunque “ha bajado bastante el papel”, lo cierto es que el 80% de los ingresos de un quiosco siguen procediendo de la venta de prensa, ya sea revistas o periódicos. Aun así, estos negocios se han visto obligados a reconvertirse y ahora ofrecen otro tipo de servicios -algunos incluso sirven café recién hecho- y venden juguetes o artículos para turistas.

Además, los quioscos “dan mucha ayuda al ciudadano”, pues suponen un elemento que “vertebra la ciudad” y forma parte de la cotidianidad urbana. De hecho, Larrea subrayó que “da seguridad”, ya que “a primera hora de la mañana no hay nadie en la calle más que los quiosqueros”, que de alguna manera acompañan a los madrugadores y a los que trasnochan.

Por esta razón, los quiosqueros reclaman al Gobierno de Manuela Carmena que saque a concurso público aquellos quioscos que permanecen vacíos, al tiempo que animan a quienes buscan un empleo a que tengan en cuenta el quiosco como una salida laboral que, aunque sacrificada, es “útil” para la ciudad.

(SERVIMEDIA)
05 Oct 2016
GIC/caa