Las precipitaciones de la semana pasada fueron escasas en toda España, con el valor máximo en San Sebastián (Guipúzcoa), donde se registraron 21 litros por metro cuadrado, según informó este miércoles el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

Los embalses alcanzaron su reserva máxima del año en la última semana de mayo, cuando llegaron al 74,2% de su capacidad. Desde entonces, han experimentado una progresiva disminución de agua embalsada.

Los niveles más altos de agua embalsada corresponden a las cuencas del Cantábrico Occidental (70,6%); Tindo, Odiel y Piedras (69,0%); el Cantábrico oriental (67,1%), las cuencas internas del País Vasco (61,9%), Galicia Costa (61,8%), el Duero (61,3%), el Miño-Sil (58,7%), el Guadiana (57,6%), las cuencas internas de Cataluña (54,5%), Guadalete-Barbate (53,9%) y el Tajo (51,5%).

Por debajo del 50% están el Guadalquivir (48,6%), el Ebro (47,9%), la cuenca mediterránea andaluza (35,3%), el Júcar (26,1%) y el Segura (23,4%).

Las únicas cuencas hidrográficas que superan las reservas del año pasado en este mismo periodo son las del Tajo (921 hm3 más) y la del Duero (421 hectómetros cúbicos por encima).

La reserva hídrica actual se sitúa por debajo de los niveles de hace un año, cuando los embalses contaban con 30.858 hm3 de agua (2.092 más que ahora), y de la media de la última década, que es de 29.066 hm3 (300 más).