Según informó este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE), entre abril y junio la renta disponible bruta de los hogares españoles fue de 189.622 millones de euros, un 2,7% superior a la del mismo periodo de 2015.

Estadística explicó que este incremento es consecuencia de un crecimiento del 3,1% del saldo de rentas primarias bruto del sector y a que la remuneración percibida por los asalariados subió un 3,4%.

Sin embargo, el saldo neto de las rentas de la propiedad percibidas (como intereses o dividendos) fue entre abril y junio un 0,9% inferior al estimado para el mismo trimestre de 2015.

Al aumento del saldo de rentas primarias bruto del sector se une un incremento en las prestaciones sociales recibidas (+1,5%), a la vez que disminuye la cuantía pagada como impuestos corrientes (-0,1%).

Por el contrario, se incrementa el montante abonado como cotizaciones sociales (+3,2%) y disminuye el saldo neto de otras transferencias corrientes recibidas (-34%).

En cuanto a la utilización de la renta disponible, el gasto en consumo final de los hogares durante el segundo trimestre se estima en 159.025 millones de euros, un 2,3% más que en el mismo periodo de 2015.

En consecuencia, los hogares registraron un ahorro bruto de 30.506 millones de euros, frente a los 29.247 millones del segundo trimestre de 2015.