Así lo recoge la OCDE en un informe publicado este jueves en el que junto a España, con las reformas fiscales más completas, se encuentran Austria, Bélgica, Grecia, Japón, Países Bajos y Noruega.

El organismo público la primera edición de las nuevas reformas de la política de impuestos, un documento anual en el que mide la evolución de la política fiscal en todos los países adscritos.

El informe proporciona una visión general de las reformas tributarias que se implementaron, legislaron o anunciaron en los países de la OCDE en 2015 e identifica las tendencias de políticas fiscales comunes en todos los países de la Organización.

El documento concluye que las reformas fiscales que se aprobaron en 2015 dan mayor énfasis a impulsar el crecimiento. Mientras que la consolidación fiscal fue el principal impulsor de las reformas fiscales en los años posteriores a la crisis, en 2015 el énfasis fue apoyar el crecimiento.

Muchas reformas se centraron en la reducción de los impuestos sobre el trabajo y la renta de las empresas, con el aumento de los ingresos relacionados, por ejemplo, con el medio ambiente.