“Cuando escuchamos las noticias acerca de las treguas sobre Siria, o la decisión de algunos países de apoyar la acción de grupos armados dentro del país, o los acuerdos de alto el fuego hecha por los gobiernos extranjeros, o la formación y envío de más combatientes a Siria, o los aviones de combate extranjeros volando sobre nuestro cielo sin permiso, siempre nos sentimos como viésemos un partido de fútbol entre las grandes potencias del mundo en territorio sirio y usando como balón sirio ‘el pueblo de Siria’”, denuncia la organización.

Cáritas Siria asegura que el resultado de ese “partido” es que están “machacando al pueblo sirio, especialmente a los más pobres, que son la mayoría”. “Después de casi seis años de guerra, como sirios estamos agotados. Esta guerra no sólo está arrasando nuestro país, sino que está destruyendo también nuestras almas desde dentro. La guerra en Siria ha golpeado cada puerta y ha entrado en cada casa, dejando sus huellas por todas partes y en cada corazón”, prosiguen.

Los responsables de la organización agregan en su mensaje que la lista de consecuencias de la guerra “es demasiado larga” y sus necesidades “enormes”, sobre todo ante la cercanía del invierno.

Además de las necesidades físicas, de bienes y servicios elementales, cuando desde Cáritas Siria preguntan a las personas acerca de su necesidad más urgente, la respuesta, “sobre todo”, dicen es: “¡Paz!”