Según dijo Simancas a través de un comunicado remitido por su partido, en el curso de la aplicación definitiva de la Lomce “causa desconcierto también ese compromiso estéril de PP y Ciudadanos por paralizar la aplicación de una reforma ya enteramente aplicada”.

“La ley recortadora ya recorta con fruición; la ley segregadora ya segrega plenamente; la ley clerical ya adoctrina a toda marcha; la ley anti-participación ya cercena el concurso de familias, docentes y estudiantes en la marcha de los centros educativos”, destacó Simancas.

Apuntó, además, que “en el colmo del “desconcierto”, tan solo cuatro semanas después de aprobar en Consejo de Ministros el decreto de las reválidas en 4º de la ESO y 2º de Bachillerato, “el partido en el Gobierno muestra ahora su disposición a echarse atrás en términos de puro chantaje”.

“Solo están dispuestos a suprimir las pruebas que amenazan a los estudiantes con frustrar su titulación y su paso a la universidad si los diputados de la oposición apoyamos la investidura de Rajoy”, declaró.

A su juicio, “ofrecen desistir de este nuevo intento por limitar el acceso de los trabajadores a la enseñanza superior a cambio de mantener a Rajoy en el poder”. “No son creíbles, pero en todo caso la respuesta es no.

INICIATIVAS SOCIALISTAS

Explicó que las primeras iniciativas del Grupo Socialista en educación serán la creación de una subcomisión parlamentaria que acometa un gran pacto social y político sobre el futuro de la educación española y su legislación básica; una proposición de ley que derogue la denostada Lomce; la petición de comparecencia del ministro para dar cuenta del decreto unilateral sobre reválidas, y una amplia batería de proposiciones no de ley para derogar el propio decreto de reválidas, acometer medidas urgentes de mejora en el sistema educativo, de refuerzo en recursos personales y materiales, de impulso a la educación 0-3 y de respaldo a la formación profesional o de apoyo a la educación rural.

Para ello, prosiguió, ha comenzado ya una ronda de reuniones con los principales interlocutores de la comunidad educativa.

“Porque el primer paso para mejorar la educación consiste en eso, en contar con la mejor disposición para el diálogo y el acuerdo en beneficio del bien común”, concluyó.