A través de una nota difundida este miércoles, los locales nocturnos del resto de la ciudad se solidarizan con los de la zona de Aurrerá y rechazan esta medida, que consideran "discriminatoria y sectaria contra aquellas empresas que cumplen las ordenanzas y las medidas de seguridad".

Para el presidente de Aebacom, José Luis Salazar, "la imposición, el ordeno y mando y la especulación con el desarrollo de estas medidas sólo pueden llevar a este Ayuntamiento a un nuevo fracaso, del cual la hostelería nocturna y la imagen de un Madrid abierto y tolerante quedará seriamente dañada".

Aebacom destaca la importancia del sector, como demuestran las conclusiones del Instituto de Estudios Turísticos, según las cuales, las actividades más habituales en los viajes a la Comunidad de Madrid de los españoles fueron ir de compras (61,7% de los viajes), visitar familiares o amigos (58,5%), realizar visitas culturales (52,8%) y salir de copas (31,8%).

Para Aebacom, la "incompetencia" del Ayuntamiento para acabar con el botellón es "manifiesta", e incapaz de atajar los puntos de venta de licores a menores y poner coto a estas prácticas de ruido en la calle, "se lava las manos pasando la patata caliente de la responsabilidad del ocio nocturno a los empresarios" que pagan sus impuestos, crean empleo y tienen acondicionados sus locales en materia de ruido.

La asociación integrada en Copyme considera que el conflicto del ruido en la calle es una competencia exclusiva de orden público que el Ayuntamiento debe solventar, y cree que en ningún caso son culpables los locales que cumplen la normativa vigente.