La federación madrileña de Enseñanza de CCOO tuvo conocimiento de las deficiencias del centro a principios de 2016, cuando trasladó a la Dirección Territorial Madrid Oeste la presencia de amianto en las instalaciones, por lo que exigió su retirada. La organización se queja de que durante todo el proceso, la Comunidad ha mantenido al margen a su sindicato.

Durante los meses de julio y agosto, CCOO solicitó información a la mencionada Dirección de Área sobre las actuaciones acometidas en el colegio sin obtener ningún tipo de respuesta, criticó en un comunicado.

“Durante estos meses el sindicato se ha dirigido por distintos medios” a la Consejería de Educación sin fruto alguno, por lo que denuncian que “la Administración no ha cumplido con su obligación de información, consulta y participación en las actuaciones a los representantes legales de los trabajadores”.

Por último, el sindicato informó de que próximamente se personarán en el centro educativo para evaluar los trabajos realizados por la Comunidad de Madrid, que habrían de pasar no sólo por la retirada del amianto sino también por la reparación de deficiencias en el cuadro eléctrico, subsanación de goteras y arreglo de ventanas, entre otras reformas.